Qué bonito es ser del C.D. Gines Baloncesto. Y lo digo ahora tras ganar la 1ª provincial y su consiguiente ascenso a 1ª Nacional, también lo decía el año pasado cuando en los primeros entrenamientos del equipo senior éramos tan sólo cuatro o cinco jugadores y por supuesto también lo decía cuando perdí hace unos años una final mini masculina con una generación espectacular.
El equipo senior masculino, el cual hemos tenido el privilegio de entrenar Luis González, David Cordovilla y quien escribe, Antonio Acuña, ha terminado la temporada consiguiendo el reto del ascenso a nacional tras una fase final en casa donde pudimos volver a sentir ese palpitar dentro de nosotros como siempre ha sucedido en las grandes citas en el pabellón de la calle Manuel Canela. Reto y objetivo. Reto porque veníamos de un equipo que hace unos años descendió de 1ª Nacional, que en su siguiente año no consiguió ni tan siquiera llenar su roster de jugadores y que en este se apostó por un grupo mezcla de veteranía y juventud que no teníamos la certeza del éxito. Y objetivo porque una entidad que tiene vistiendo sus colores azul y amarillo a cerca de 300 jugadores no merece menos que poder tener un faro en el área masculino en la 1ª Nacional.
Resumen rápido de nuestro equipo en la fase final senior.
Semifinales CD Gines Baloncesto – Mairena del Aljarafe
Aunque el resultado indique 68-54, la realidad mostrada en la pista fue una diferencia muchísimo menor. Nuestro objetivo era detener a su jugador número 3, para nosotros el gran quebradero de cabeza durante la semana, y por supuesto a su jugador número 10. Spoiler: no los pudimos parar. Sabíamos que nos enfrentaríamos a una zona pero que teníamos súper trabajada, de hecho, desde casi el último mes de entrenos ya pensando en ese partido puesto que se podían intuir los cruces tanto en cuartos como en unas posibles semifinales. Y así fue, nos plantaron zona que pudimos atacar decentemente. Preocupados de su juego en campo abierto que durante el inicio no pudimos contener. Al final cuestión de ritmo y de imponer el nuestro. Y en momentos críticos, supimos hacerlo, lo cual nos llevó a la victoria. Pero increíble temporadón de Mairena. De mis equipos favoritos este año, sin lugar a dudas.
Final – CD Gines Baloncesto – CB Fresas
He de confesar que queríamos enfrentarnos a Coria puesto que en liga no nos habíamos cruzado y porque fue el campeón del otro grupo. Ni que decir tiene, que me alegré también infinito por Fresas. El club colegial tiene una filosofía clara. Equipo joven, con gente de la casa que además poseen esa libertad y esa sinvergonzonería en pista que su entrenador les anima a tener. El objetivo era claro contra ellos: hacernos fuertes con nuestro juego interior, no entrar en su ritmo, que no nos corran y que no tiren de tres, que vayan a aro a chocar contra nuestros grandes. Pues bien, en la primera parte nos corren como quieren, nos anotan muchísimo de tres (suerte para nosotros que algunas pisaron), nos aprietan con su rebote ofensivo y además nuestros grandes no encuentran su sitio, aunque si los pudimos cargar de faltas.
Venían de anotar un 10/25 en triples en el día anterior. Que sumados a los tiros libres anotados y a las canastas en contraataques conformaban el 80% de la anotación. En el descanso otra vez a repetir que no queríamos esa locura, que en ese ritmo estábamos perdidos. Nuestro mejor cinco, Antonio Ruiz, lesionado el día anterior y no puede apenas pisar la pista. Nuestro jugador más determinante, Juanra, expulsado tras numerosas faltas en ataque ante la diferencia de peso. Sólo nos podíamos encomendar a la épica. Y así fue, en los minutos finales y con el marcador muy apretado pudimos hacer nuestro juego y mostrar una veteranía y una calma que fue lo que nos llevó a alzarnos con el título.
¿Cómo pudimos llegar hasta aquí con jugadores tan diferentes? ¿Cómo mezclar agua y aceite? ¿Cómo combinar jugadores jóvenes, con jugadores veteranos y con gente de la casa que llevan en el club desde sus inicios? Nosotros teníamos claro que el nexo de unión debía ser el trabajo y la implicación. Y a ello nos pusimos desde el primer momento. Nadie sabe el trabajo que hay detrás de esto salvo nuestras familias que son los que lo han vivido desde dentro. Aún recuerdo la madrugada del partido contra Gelves la temporada pasada… ¡A las tres y se seguía con el scouting! La mala noche que pasé personalmente antes del partido de vuelta contra Carmona… ¡No dormí nada! O el mismo domingo antes del partido contra Fresas… ¡No sé cuántas veces me vi el partido de semifinales! Charlas interminables en el grupo de whatsapp del staff senior, llamadas con unos y con otros para intentar llegar a ellos, audios de cinco minutos que si no llega a ser por el x2 no sé qué hubiese sido de mí… Esto también es ser entrenador.
Quiero mencionar a los artífices. Luis y sus discursos motivacionales; Cordo y la experiencia del jugador que ya ha ascendido una vez; Alfonso y su trabajo incansable en vídeos y en todas las funciones de delegado… No he podido juntarme con mejor gente. Como de bonito fue trabajar junto a gente súper currante como lo es Merchi, ex – presidenta del club qué apostó por mí, junto a su directiva y director deportivo. Y si hablamos de gente currante, quiero nombrar también aquí a Josele Fernández, que a pesar de que no le gusta el baloncesto como él dice, no os podéis imaginar todo lo que ha hecho por el club en esta temporada. Y, por último, mencionar a Juanma Valero, el nuevo presidente. Otro jartible del basket que se parece mucho a mí porque quiere estar en todos lados y ayudar en donde se pueda. Gente que siempre suma.
¡Qué bonito es ser del C.D. Gines Baloncesto! Todo el trabajo de estos dos últimos años ha merecido la pena y no sólo por el resultado final sino por la cantidad de cosas que nos hemos ido llevando por el camino. Al final la felicidad reside en esos pequeños detalles que te hacen sacar una sonrisa al final del día y yo he tenido muchas de esas al final de cada entrenamiento y de cada partido durante estos años en Gines.